Como parte de la iniciativa Puerto Abierto y con el objetivo de ofrecer apoyo alimentario, económico y ocupacional, el Programa Cultural de Fundación FEMSA colaboró con organizaciones locales para otorgar 100 huertos urbanos móviles a familias de migrantes y refugiados que viven en la localidad de Juárez, Nuevo León. La entrega del huerto número 100 fue para una familia proveniente de Honduras.
“Estamos convencidos del potencial que tiene el arte como agente transformador de nuestras comunidades. A través de Puerto Abierto hemos invitado al diálogo y a conectar con grupos vulnerables, hemos generado espacios de encuentro y acciones de impacto a través de dos cosas que están en el corazón de Fundación FEMSA: la creación artística y la acción colectiva”, dijo Lorena Guillé-Laris, directora de Fundación FEMSA.
Puerto Abierto es una iniciativa que integra la investigación de campo, el arte y la comunicación en el desarrollo de proyectos dirigidos a personas migrantes y refugiadas en Nuevo León, mediante la cual, el Programa Cultural de Fundación FEMSA, comprometido con impulsar el arte y cultura latinoamericanos, así como fortalecer el ecosistema cultural de la región, ha buscado, en el contexto de la pandemia por COVID-19, construir puentes de colaboración entre personas y familias que migran a nuestro estado, instituciones que trabajan con ellas y creadores del sector artístico y cultural del área metropolitana de Monterrey.
“Cada uno de los ejes de Puerto Abierto explora cómo podemos dar respuesta, desde el arte y las instituciones culturales, a la emergencia sanitaria generada por la pandemia y a la emergencia humanitaria vinculada al desplazamiento forzado de cientos de miles de personas en el mundo.
Las capacidades de los artistas pueden traducirse a nuevos espacios y contribuir a generar transformaciones sociales que van desde el cuidado de la salud, atención alimenticia y acercamiento a la niñez migrante, hasta la visibilización de las historias de los migrantes y refugiados que han quedado plasmadas en un podcast que lanzaremos durante el siguiente año, con el anhelo de que no haya quien camine por el estado de Nuevo León sin dejar huella”, expresó Sofía Garfias.
La entrega de huertos urbanos ha beneficiado a cerca de 450 migrantes y refugiados en Nuevo León y fue posible gracias a la colaboración entre el equipo del Programa Cultural de Fundación FEMSA, ACNUR, Casa Monarca, Zihuame Mochilla y Taller Nuevo Norte.