El Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, puso en marcha la Fase uno del Gasoducto Los Ramones, en la estación asentada en la carretera libre a Reynosa, kilómetro 88.
Con la develación de una placa alusiva, las autoridades de los tres niveles de gobierno dieron por inaugurada la obra en la que se invirtieron 600 millones de dólares y que servirá para transportar gas natural de la frontera sur de Estados Unidos hacia la región a través de un ducto de 48 pulgadas, con capacidad de 2.1 mil millones de pies cúbicos diarios y una longitud de 116.4 kilómetros.
El Jefe del Ejecutivo Federal calificó al gasoducto como una obra trascendental para detonar regiones de Nuevo León y Tamaulipas y llevar el gas al centro del país.
“La obra que hoy estamos inaugurando es parte del gran proyecto de infraestructura en materia de gasoductos que este gobierno está llevando a cabo y se propone llevar a cabo en los siguientes años, porque de esa manera estaremos asegurando que distintas regiones del país tengan accesos a insumos como el gas natural, fundamental para atraer inversiones productivas”, afirmó Peña Nieto.
En su mensaje, Armando Garza Sada, Presidente del Consejo de Administración del Grupo Alfa; señalo que con el gasoducto los empresarios de Nuevo León se sienten escuchados en sus demandas.
El gasoducto forma parte del Plan de Negocios de Pemex para el presente sexenio federal que incluye contratos con sociedades de inversionistas privados que tienen previsto ampliarlo en 738 kilómetros para llevar el energético hasta los estados de Guanajuato, Querétaro y San Luis Potosí, con inversiones totales calculadas en dos mil 500 millones de dólares.