Con un emocionante juego en el que Tigres dominó la mayoría de los 90 minutos efectivos, aunque sin goles, el club auriazul alcanzó su boleto para la Fiesta Grande del futbol y ahora espera a su rival por la Copa del Apertura 2014.
A unos días de su intervención en el tendón de Aquiles, un emocionado Juninho, llegó hasta la cancha del Estadio Universitario en silla de ruedas y apoyado en un par de muletas recibió el abrazo de sus compañeros quienes sostenían la lona en la que mostraban su apoyo al capitán.
Después todo fue emoción en las gradas del Estadio, donde más de 41 mil incomparables acompañaron a Ricardo Ferretti en su partido centenario como timonel en Liguilla.
Por su posición en la tabla, Tigres avanzó a la final pues el marcador de los 180 minutos se quedó intacto 0-0.
Al silbatazo final, tras cuatro minutos de compensación, la hinchada de Tigres coreó a todo pulmón, con sus jugadores arengando desde la cancha, su deseo de volver a ser campeones con el canto de batalla que surgió en el 2011: “Vamos Tigres, te quiero ver campeón otra vez”…