Funcionarios de México y Estados Unidos inauguraron el puente ferroviario internacional Matamoros-Brownsville que une a ambas ciudades y se convierte en el primer cruce erigido entre las dos naciones en más de 100 años.
Esta obra reemplazará al puente ferroviario vehicular que se construyó en 1910. El nuevo cruce fue diseñado para aliviar el congestionamiento urbano y mejorar la seguridad vial al redirigir el tráfico de trenes fuera de las áreas urbanas de Matamoros y Brownsville, al mismo tiempo que se incrementa la capacidad de transporte. El flujo de bienes y de personas en ambas ciudades aumentará sustancialmente y mejorarán las condiciones ambientales de la región.
Los tiempos de espera de cruce entre ambos países, tanto para vehículos ligeros como para transporte de carga, se reducirán considerablemente e impulsarán el desarrollo económico de la región.
Debido a la prioridad que México y Estados Unidos conceden a su relación económica, esta obra fue incorporada en las discusiones de los mecanismos de concertación binacional como son el Diálogo Económico de Alto Nivel (DEAN) y la Declaración para la Administración de la Frontera en el Siglo XXI, instancias impulsadas por los presidentes Enrique Peña Nieto y Barack Obama en las cuales sus administraciones colaboran conjuntamente para fortalecer el intercambio comercial y la seguridad.
Su conclusión ejemplifica el compromiso de ambos gobiernos para mejorar la infraestructura existente a lo largo de la frontera común.
El flujo de bienes entre México y Estados Unidos tiene un valor aproximado de 1.5 mil millones dólares diariamente. El 80% del comercio bilateral fluye por la vía terrestre y ferroviaria.
Las importaciones mexicanas hacia Estados Unidos tienen un 40% de contenido estadounidense, lo que significa que los insumos cruzan la frontera en múltiples ocasiones en ambos sentidos antes de convertirse en un producto final.
México y Estados Unidos invirtieron aproximadamente 100 millones de dólares en el proyecto. Se estima que el flujo de bienes en la región Matamoros-Brownsville se incremente hasta en un 40 por ciento.
En la ceremonia participaron, por parte de México, los secretarios de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray Caso; de Relaciones Exteriores, José Antonio Meade Kuribreña; de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza; el jefe del Servicio de Administración Tributaria, Aristóteles Núñez Sánchez; el gobernador de Tamaulipas, Egidio Torre Cantú; y la presidenta municipal de Matamoros, Leticia Salazar.
La delegación estadounidense estuvo integrada por la secretaria de Comercio, Penny Pritzker; el comisionado de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, R. Gil Kerlikowske; el alcalde de Brownsville, Texas, Tony Martínez, y el encargado de negocios de la embajada de Estados Unidos, William H. Duncan.