Es casi maquiavélico, pero la Selección Mexicana cumplió la misión y si de resultados se trata, este equipo es tan implacable que está ya muy cerca de la calificación al Mundial de Rusia 2018.
Podría no hacer nada en el resto del Hexagonal Final y quizá le alcanzaría para calificar.
Por eso era tan importante completar la tarea en esta sesión de eliminatorias que inició con ese 2-0 ante Costa Rica en el Estadio Azteca y que culminó con el 1-0 en Puerto España, informó Fox Sport en su portal.
Ese era el objetivo que incluso compartieron los líderes de la Selección Mexicana antes de que iniciaran estos partidos. La meta era conquistar lose seis puntos a como diera lugar para tener la posibilidad de jugar la Copa Confederaciones Rusia 2017 ya calificado a la Copa del Mundo que se jugará el próximo año en ese mismo país. Y Juan Carlos Osorio y compañía lo consiguieron.
¿Jugando de forma agradable? Ese no es menester de este equipo, que tiene su fortaleza en su solidez, eficacia y contundencia. Y para muestra, el gol de Diego Reyes.
Claro que todo pudo cambiar (quizá hubiera sido un mejor partido) si no fuera por ese gol mal anulado a Trinidad y Tobago, que hubiera significado el 1-0 parcial.
Pero México sabe pegar en el momento preciso.
Y a los 58 minutos, un balón mandado desde la punta derecha del tiro de esquina (como fue el segundo gol ante Costa Rica), esta vez enviado por Miguel Layún con comba hacia adentro, encontró la altura de Diego Reyes, para que este se levantara y golpeara el balón con fuerza. Misión cumplida para el equipo ‘azteca’, el resto del encuentro fue mero trámite.
La inspiración accidentada y los chispazos de los trinitarios se acabaron con el silbatazo del medio tiempo. Y tampoco fue que México tuviera muchas más opciones para hacer más goles. No los necesitaban, solo había que manejar el encuentro, como lo ha hecho casi de forma infalible.
México tiene 10 puntos tras cuatro jornadas del Hexagonal Final, una menos que todo lo que consiguió en la pasada eliminatoria donde terminó yéndose a repechaje.
“El fin justifica los medios” y tampoco hay que hacerle el feo a la idea de que este equipo esté caminando en el Hexagonal después de las amenazas de infarto en las últimas dos eliminatorias.