*En los últimos años ese grupo industrial incrementó en hasta 800 mil toneladas anuales la producción de sal evaporada.

Armando Torres/Empresas Monterrey.- El negocio de sal evaporada para consumo doméstico y aplicaciones industriales, se ha convertido en el “oro blanco” que impulsa a CYDSA y que le ha permitido mantener un buen desempeño durante el 2019.

La apuesta de Tomás González Sada, presidente del Consejo de Administración de CYDSA en los últimos años, fue enfocada a incrementar la capacidad instalada en el negocio de sal, estrategia que está arrojando los resultados esperados.  La sal fue considerado como el «oro blanco» de Los Romanos.

En el Negocio de Sal para Consumo Doméstico y Aplicaciones Industriales, CYDSA incrementó su capacidad productiva de 400 mil a 700 mil toneladas anuales, esto como resultado de un proyecto expansión de varias etapas concluido en 2017.

Posteriormente en 2018, mediante la implementación de estrategias de productividad y mejores prácticas de manufactura, CYDSA logró superar la capacidad instalada de diseño y elevar la producción anual de sal a 800 mil toneladas.

Lo anterior, permitió fortalecer la competitividad de la subsidiaria de CYDSA, Sales del Istmo, posicionándose como la mayor productora de sal evaporada del Continente Americano y uno de los mayores exportadores en Centroamérica, El Caribe y los mercados hispanos en Estados Unidos.

CYDSA ha registrado una mayor demanda de Sal La Fina en el mercado hispano y de la sal de uso industrial en el sector de alimentos de Estados unidos.

En contraste en México, amplió la campaña “La Sal que conviene, La Fina”, y reforzó la estrategia para posicionar sus productos como La Fina, La Fina Chile y Limón, Sal Light La Fina, así como la sal en grano Cisne.

Asimismo, ha mejorado la imagen de marcas regionales de sal como Bakará, Carmen, Palomitos, Cisne, Clara y Gallos.

Para ofrecer un producto de la más alta calidad, CYDSA cumple con normas y certificaciones nacionales e internacionales de inocuidad alimentaria y de industria limpia, como es el caso de la recertificación de la norma FSSC-22000:2013 enfocada a garantizar la pureza del producto.

Además para asegurar la operación sustentable del negocio de sal, CYDSA renovó sus certificaciones ISO-9001:20015 e ISO-14001:2015.

La compañía que preside el empresario Tomás González Sada, logró acumular ventas totales por 5 mil 302 millones de pesos durante el primer semestre de 2019, un ligero incremento del 0.6 por ciento. Los negocios de sal y gases refrigerantes fueron los que contribuyeron a ese buen desempeño.

CYDSA opera con 20 subsidiarias en 20 poblaciones de México y tiene presencia en 15 países a los que exporta sus productos.