México pugnará siempre por la solución pacífica de los conflictos internacionales, afirmó Ricardo Monreal Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República.
Ante el ataque iraní con misiles a la base militar estadounidense de Al Asad en Irak, el también coordinador del Grupo Parlamentario de Morena se pronunció para que el diálogo se imponga a la violencia y se utilicen los canales institucionales y diplomáticos para restablecer la calma.
Mediante un mensaje en sus redes sociales, el legislador zacatecano dijo que, ante la escalada del conflicto, este es un momento crucial que marcará el futuro de la tensión y lamentó el aumento de la violencia, sobre todo por el reporte de pérdidas humanas en el ataque.
El legislador hizo hincapié en que este incidente incrementa la tensión entre los Estados Unidos de Norteamérica e Irán, además de que provoca un desbalance aún mayor que aleja a ambas naciones de alcanzar un acuerdo pacífico”, expresó el coordinador de la Junta de Coordinación Política.
Manifestó que el ataque con misiles se dirigió a la instalación bélica más grande de Estados Unidos en territorio iraquí.
El político morenista consideró también, en el artículo Medio Oriente: entre el impeachment y la guerra, que en todos los escenarios de posibles conflagraciones mundiales, siempre aparece el Medio Oriente como un detonador potencialmente disruptivo.
Escribió, contundente que, “tal vez por eso, la semana pasada, inmediatamente después del ataque aniquilador contra el general iraní y segundo hombre fuerte de Irán, Qassem Soleimani, en Bagdad, por parte de los Estados Unidos, la percepción extendida que se convirtió incluso en tendencia mundial fue #WWIII (Tercera Guerra Mundial)”.
Es probable que no llegue a tanto este conflicto, pero tampoco se puede minimizar en sus efectos, aclaró más adelante, e insistió en que uno de ellos, el más probable, es que regresen con fuerza los amagos e intentos de ataques terroristas directos en la Unión Americana y en objetivos de ésta fuera de su territorio.
Ello coloca a México -añadió-, en alerta y tensiones altas, ya que, para muchos grupos del terrorismo internacional, especialmente los de Medio Oriente, somos un territorio trampolín o poroso para el ingreso ilegal a Estados Unidos o, incluso, para atentar contra sus instalaciones estratégicas en nuestro país, que podrían ir desde su Embajada, hasta corporativos privados emblemáticos o inclusive ciudadanos notables asentados o en tránsito por la República Mexicana.
Recordemos que cuando el ataque a las Torres Gemelas de NY, el 9/11, las primeras hipótesis sobre el ingreso de los comandos que perpetraron los atentados señalaban un posible tránsito ilegal de los mismos por la frontera con México. Después se revelaría que ingresaron de manera legal por Canadá.