La nueva inversión incluye la construcción de una nueva línea integrada de producción de cemento de 1.5 millones de toneladas en su Planta Solid, en Luzón. Esto duplicará la capacidad de la planta Solid y representará un aumento del 25% en la capacidad de cemento de la compañía en las Filipinas.
Se trata de la empresa regiomontana CEMEX, que destinará 300 millones de dólares para incrementar su capacidad de producción en Filipinas.
Con la reciente visita de Fernando González Olivieri, Director General de CEMEX, y su equipo ejecutivo a Filipinas, en la que destacó un encuentro con el Presidente Benigno S. Aquino III, CEMEX enfatizó su compromiso continuo con el crecimiento del país.
«Vemos una tendencia positiva en el entorno empresarial y estamos comprometidos a ser un proveedor de cemento confiable dada la creciente necesidad de los materiales de construcción de alta calidad necesarios para infraestructura pública, proyectos comerciales, y vivienda», dijo Fernando González Olivieri.
A principios de este mes, CEMEX Filipinas inauguró oficialmente la expansión de capacidad en su planta de APO en Cebu, la planta cementera más grande del país, así como una red de centros logísticos en Visayas y Mindanao. La inauguración de las nuevas instalaciones coincidió con la celebración del Día del Trabajo y fue igualmente distinguida por el presidente Aquino y varios de los miembros de su gabinete.
Los 80 millones de dólares invertidos permitieron incrementar en 40% la capacidad de producción de cemento de la planta de APO de CEMEX y mejorar las capacidades de distribución con terminales adicionales en Iloilo y Davao.
«Preparamos nuestras instalaciones para el aumento de la demanda en las Filipinas, reiterando nuestro compromiso de apoyar el desarrollo del país», dijo Joaquín Estrada, Presidente de CEMEX Asia. «Nos esforzamos por ser un socio del gobierno de Filipinas y la comunidad empresarial para garantizar el crecimiento y el progreso”.
Adicionalmente, CEMEX Filipinas ha establecido una planta de energía de calor residual con valor de 18.6 millones de dólares que permitirá capturar el exceso de calor en una de sus instalaciones de producción de cemento para producir electricidad. Hasta la fecha, CEMEX Filipinas ya está utilizando combustibles alternos, tales como cáscaras de arroz y combustible derivado de residuos (RDF) como parte de su mezcla de combustible para reducir sus costos de energía.